jueves, 3 de mayo de 2012

 “Si coloco mis huesos como rieles sobre el Río Pirro,
 envolverás mi alma con tu piel en contra del devastador hierro del mañana?

Hace dos años pasaba por el puente del Río Pirro en la Universidad Nacional y me preguntaba cómo podían los estudiantes soportar el olor y el peligro de la contaminación de un río por el cual tenían que pasar varias veces al día para ir a sus clases. Fue entonces cuando pensé en la posibilidad de crear un performance directamente en ese río. Entonces cuando Vicky Cortéz me invitó a dirigir una pieza con la Compañía de Cámara Danza Una, le propuse la idea con la ilusión de poderla girar por diferentes ríos de Costa Rica.
“Río Pirro” es una escultura social performática creada con la Compañía, que nace a través de un llamado participativo en transformar y redefinir condiciones, pensamientos y estructuras que informan nuestras vidas. La escultura social enfatiza el rol de la imaginación en la transformación de los procesos sociales y la centralidad de formas alternativas del pensamiento. Mi interés es el de concebir una intervención artística y una estrategia conceptual en un lugar muy específico que represente algo mucho más universal. Nuestro reto es el de investigar qué tipo de estructuras se necesitan crear para apoyar nuevos modelos artísticos, y experimentar con los obstáctulos que se presentan al tratar de producir orgánicamente este tipo de trabajo. A raíz de esta premisa se concluyó que el performance comenzó desde el primer día que pusimos un pie en el Río Pirro. La maquinaria y los trabajadores nos cambian diariamente la escenografía y por lo tanto sabemos que dada las circumstacias, cada performance será diferente a la anterior. El concepto del trabajo se irá fortaleciendo día a día siempre y cuando aprendamos a vivir plenamente en la incertidumbre, y si el compromiso con el proceso está por encima del resultado, dichosamente este nunca se solidificará.

Elia Arce  

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